La Catedral de Navarra, situada en Mendavia (Navarra), cuenta con una experiencia y tradición de más de 70 años en el sector de las conservas vegetales.
La región navarra posee una tierra rica y fértil que resulta idónea para lo cosecha de verduras de alta calidad. Cuentan con una amplia gama de conservas vegetales donde destacan el espárrago, la alcachofa de Tudela o el pimiento del piquillo, del que hablaremos en esta entrada.
Para la producción de sus conservas, La Catedral de Navarra selecciona las mejores tierras para el cultivo siempre cerca de su fábrica, con el fin de llevar un control sobre la materia a utilizar.
Todos los productos son siempre de temporada, siguen el ciclo natural de la planta para conseguir su máximo sabor, aroma y textura. Además, son recolectados a mano uno a uno y en su punto óptimo de maduración.
Una vez que los frutos han pasado una primera selección en el campo a la hora de recogerlos, es en fábrica donde se escogen solo los frutos que cumplen sus estrictos estándares de calidad. Las verduras son envasadas manualmente, siguiendo un riguroso control de higiene y envasado, para que solo pasen unas horas entre la recolección y su envasado, para que no pierda ningún aroma o sabor.
EL PIQUILLO DE LODOSA
La Catedral de Navarra ofrece un pimiento del piquillo que destaca por su calidad y versatilidad en la cocina. Este producto, amparado por la Denominación de Origen Piquillo de Lodosa, es el resultado de un proceso artesanal que consigue preservar todas las características de la huerta navarra.
Pero, ¿por qué son tan especiales?
- Se recogen en su punto óptimo de maduración, asegurando un sabor dulce y equilibrado.
- Son asados de manera tradicional a la llama directa, consiguiendo un aroma ahumado.
- Los pimientos se pelan a mano uno a uno, eliminando la piel con gran cuidado.
- Son envasados en seco, es decir, no se utilizan agua con el fin de evitar la dilución de los sabores y mantener la intensidad del producto.
Todo este proceso de elaboración meticuloso da como resultado unos pimientos del piquillo de sabor intenso y textura carnosa.
VERSATILIDAD EN LA COCINA
Los pimientos del piquillo de La Catedral de Navarra son un gran aliado para los restauradores de Galicia, ya que son perfectos para rellenar con pescados o mariscos, como bacalao o vieiras, e incluso para acompañar carnes y pescados a la brasa.
También son una opción perfecta para elaborar tostas gourmet como esta deliciosa tosta de piquillo confitado con ventresca y mayonesa de piquillo.
En nuestro catálogo podrás encontrar los pimientos del piquillo en diferentes formatos y en envases muy cómodos que facilitan su conservación.
Las conservas vegetales de La Catedral de Navarra son el resultado de un buen saber hacer transmitido a lo largo de varias generaciones. Gracias a sus productos podrás transportar a Galicia los mejores sabores de la huerta navarra. Encuentra en nuestra web la gran selección de conservas vegetales que nos ofrece La Catedral de Navarra.
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Rojos, pequeños y dulces: así son los pimientos del piquillo
La Catedral de Navarra, situada en Mendavia (Navarra), cuenta con una experiencia y tradición de más de 70 años en el sector de las conservas vegetales.
La región navarra posee una tierra rica y fértil que resulta idónea para lo cosecha de verduras de alta calidad. Cuentan con una amplia gama de conservas vegetales donde destacan el espárrago, la alcachofa de Tudela el pimiento del piquillo, del que hablaremos en esta entrada.
Para la producción de sus conservas, La Catedral de Navarra selecciona las mejores tierras para el cultivo siempre cerca de su fábrica, con el fin de llevar un control sobre la materia a utilizar.
Todos los productos son siempre de temporada, siguen el ciclo natural de la planta para conseguir su máximo sabor, aroma y textura. Además, son recolectados a mano uno a uno y en su punto óptimo de maduración.
Una vez que los frutos han pasado una primera selección en el campo a la hora de recogerlos, es en fábrica donde se escogen más a conciencia. Las verduras son envasadas manualmente, siguiendo un riguroso control de higiene y envasado, para que solo pasen unas horas entre la recolección y su envasado, para que no pierda ningún aroma o sabor.
EL PIQUILLO DE LODOSA
La Catedral de Navarra ofrece un pimiento del piquillo que destaca por su calidad y versatilidad en la cocina. Este producto, amparado por la Denominación de Origen Piquillo de Lodosa, es el resultado de un proceso artesanal que consigue preservar todas las características de la huerta navarra.
Pero, ¿por qué son tan especiales?
- Se recogen en su punto óptimo de maduración, asegurando un sabor dulce y equilibrado.
- Son asados de manera tradicional a la llama directa, consiguiendo un aroma ahumado.
- Los pimientos se pelan a mano uno a uno, eliminando la piel con gran cuidado.
- Son envasados en seco, es decir, no se utilizan agua con el fin de evitar la dilución de los sabores y mantener la intensidad del producto.
Todo este proceso de elaboración meticuloso da como resultado unos pimientos del piquillo de sabor intenso y textura carnosa.
VERSATILIDAD EN LA COCINA
Los pimientos del piquillo de La Catedral de Navarra son un gran aliado para los restauradores de Galicia, ya que son perfectos para rellenar con pescados o mariscos, como bacalao o vieiras, e incluso para acompañar carnes y pescados a la brasa.
También son una opción perfecta para elaborar tostas gourmet como esta deliciosa tosta de piquillo confitado con ventresca y mayonesa del piquillo.
En nuestro catálogo podrás encontrar los pimientos del piquillo en diferentes formatos y en envases muy cómodos que facilitan su conservación.
Las conservas vegetales de La Catedral de Navarra son el resultado de un buen saber hacer transmitido a lo largo de varias generaciones. Gracias a sus productos podrás transportar a Galicia los mejores sabores de la huerta navarra. Encuentra en nuestra web la gran selección de conservas vegetales que nos ofrece La Catedral de Navarra.
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